En este libro encontrarás un proceso reflexivo y a la vez activo sobre el cómo y el para que dejar a tus hijos e hijas crecer sin quemar etapas. Un camino con 5 paradas en el que en cada una de ellas te harás preguntas que te llevarán a construir tu propio viaje educativo:
1. Crecer sin prisas: ¿Que significa crecer sin prisas? ¿Que puedo hacer yo para que mis hijos e hijas crezcan sin quemar etapas de desarrollo? ¿Cómo se lo que necesitan mis hijos e hijas para crecer felices y en bienestar?
2. Educar sin prisas: ¿Que significa educar? ¿Y educar sin prisas? ¿Cómo puedo hacerlo sin sentir miedo a hacerlo mal? ¿Cómo lo hago si a duras penas puedo controlarme yo y controlarlos a ellos y ellas?
3. Aprender sin prisas: ¿Que necesitan para aprender? ¿Cómo lo hago sin desaprovechar sus talentos e inteligencias? ¿Cómo motivarlos sin mermar sus ganas de aprender y cultivando su creatividad?
4. Crecer en conexión: ¿Para qué necesito estar conectada y a qué? ¿Cuál es la magia de la conexión en familia? ¿Cómo puedo crear estas conexiones importantes? ¿Cómo puedo yo conectar con su juego si no sé jugar?
5. Crecer jugando: ¿Qué es el juego? ¿Para qué es importante? ¿Pueden mis hijos e hijas aprender jugando? ¿Cuáles son las etapas del desarrollo y del juego? ¿Qué tipo de juegos son fundamentales para ellos y ellas según su edad? ¿Qué necesito yo para sentir esas ganas de jugar? ¿Qué juegos puedo ofrecerles para jugar? ¿Hasta cuándo crecer jugando?
El propósito de este libro es:
– Despertar tu propia mirada para que puedas observar las individualidades de cada uno de tus hijos e hijas y las tuyas propias.
– Acompañarte en un trabajo interno, personal y vivencial para que esa mirada no se quede en el papel, sino que penetre en el aspecto práctico y se integre en la manera de acompañar a tus hijos e hijas que tú decidas crear.
– Crear tu forma propia y personal de educar y acompañar a tus hijos e hijas más allá de dogmas y modas, y entendiendo que tanto tú como cada uno de los miembros de tu familia sois únicos y que eres, junto a tu pareja, la verdadera líder educativa que tus hijos e hijas necesitan para crecer sanos y equilibrados, encontrando tu lugar, tu sentido y tu intención en el camino de acompañarlos.
